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Aunque difiere de algunos sistemas mágicos que normalmente se basan en un modelo o mapa del universo espiritual/físico, como el Árbol de la Vida, el Libro de la Ley o las Runas Nórdicas, la Magia del Caos se basa en unos pocos 'Principios'. ” o “Errores que normalmente se esconden detrás de tu enfoque de la magia (sin embargo, no son axiomas universales, así que siéntete libre de cambiarlos si lo deseas).
1. La falta de dogmatismo.
Los magos del caos se esfuerzan por evitar caer en el dogmatismo (a menos que expresar dogmatismo sea parte de un sistema de creencias temporal en el que hayan entrado). “A los discordianos les gusta usar 'Catmas'” ¡Nosotros los discordianos a veces no estamos de acuerdo con esto “! Así, los Magos del Caos se sienten impulsados a cambiar de opinión, a contradecirse con estilo proponiendo argumentos que son alternativamente plausibles e improbables.
De una forma u otra, un punto de vista siempre es erróneo. (Nada es verdad). Por otro lado, los caosistas utilizan todas las herramientas y mejores armas de cada realidad que encuentran en el camino. (Todo está permitido)
2. La experiencia personal es suprema.
En otras palabras, no creas nada de lo que leas –NI SIQUIERA ESTO–, ni lo confirmes por ti mismo. La palabra clave es práctica, sin ella, querido Pinocho, nunca serás un niño de verdad. Algunos emitirán un torrente de palabrería en lugar de admitir que no saben la respuesta, mientras que un verdadero adepto diría; “NO TENGO IDEA” o “NO LO SÉ”. ¿VAMOS A INTENTARLO?". Muy pronto los magos del Caos descubrieron la sorprendente verdad de que una vez que te despojas de tus dogmas, convicciones personales, actitudes y chistes, cualquier técnica particular de magia práctica puede realizarse y conquistarse.
3. Desacondicionamiento.
El paradigma del Caos propone que las tareas principales del mago potencial son descondicionarse de sus creencias, actitudes y ficciones sobre sí mismo, la sociedad y el mundo. Nuestro ego es una ficción escrita en parte por el mundo y en parte por nosotros mismos. Y los llamados rituales de iluminación, que antes eran vistos como las escaleras de Job que llevarían al cielo o a una posible evolución espiritual, ahora son vistos como medios para subirse a la montaña rusa posmoderna de paradigmas.
Usando ejercicios de desacondicionamiento, podríamos comenzar a ampliar las grietas en nuestra realidad consensual que, con suerte, nos permitirían estar menos apegados a nuestras convicciones y autoficciones y así tener el poder divino de "descartar las Realidades". Sólo aquellos que destruyeron su hogar inicial tienen el poder de crear mundos, pero no seas sólo un poseedor de ilusiones, sé un vagabundo.
4. Diversos enfoques.
Como mencioné anteriormente, la magia "tradicional" comienza eligiendo un sistema particular y adhiriéndose a él. La perspectiva del Caos fomenta el enfoque del adepto para su desarrollo, y los magos del Caos son libres de elegir cualquier sistema mágico disponible, temas de la literatura, la televisión, las religiones, los cultos, la parapsicología, etc. Cambio constante y caminos infinitos, eso es lo que quiere Caoísta.
5. Gnosis.
Una de las claves de la habilidad mágica es la capacidad de entrar en estados alterados de conciencia a voluntad. Tendemos a trazar una línea clara entre "conciencia" y "estados alterados", cuando en realidad nos movemos entre diferentes estados de conciencia, como soñar despiertos, "piloto automático" (donde nos vemos realizando acciones sin cognición) y diversos grados de Atención, en todo momento. Sin embargo, en lo que respecta a la magia, la entrada a estados alterados intensos se puede dividir en los dos factores de Sueño y Gnosis. Sueño, como sabes es cuando te vas a dormir, la Gnosis en cambio es cuando te despiertas de la realidad.
