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mantener una diario magico Es una de las tareas más sencillas que un estudiante puede realizar y es, sin duda, un valioso medio para evaluar el propio desarrollo y evolución.
En algunas organizaciones mágicas y espirituales, el diario juega un papel importante en la evaluación de las etapas recorridas por el aspirante y puede ser utilizado tanto por el “instructor” como por el “instruido”. Uno de los ejemplos más notorios de esta práctica lo encontramos en Astrum Argentum y otras organizaciones de carácter thelémico, aunque no se limitan a ellas.
El diario debe escribirse de tal manera que otros puedan beneficiarse de su lectura, incluso si sólo el propio autor tiene acceso a los escritos.
El diario es básicamente el registro sistemático de prácticas, ejercicios, estudios, intuiciones, sueños y otras experiencias y condiciones relevantes para el individuo durante su viaje iniciático y evolutivo dentro de su propio camino.
Muchos estudiantes tienden a no darle importancia a registrar sus pasos, errores, aciertos y “condiciones”, y se justifican diciendo que no tienen contenidos relevantes para llevar un diario. Otros prefieren confiar en la memoria o simplemente no le dan importancia a esta actividad.
El diario es útil para desarrollar la memoria y mantenerla más cerca de los “estándares de la realidad”, ya que una parte considerable de nuestros recuerdos comunes es producto de nuestra imaginación. Sí, recordamos lo que no sucedió, al menos en parte, porque nuestro cerebro “crea recuerdos” y llena los vacíos con eventos que nunca ocurrieron. Registrar en detalle una experiencia particular en su diario le ayuda a mantener un registro casi preciso de lo que sucedió, cómo sucedió, por qué sucedió, cuándo sucedió, a quién le sucedió y dónde sucedió. Esta actividad nos priva de una de las trampas más comunes que engendra nuestra propia memoria.
Muchos estudiantes quisieran recordar sus sueños para intentar interpretarlos a la luz de sus propios conocimientos, pero se quejan de que no los recuerdan o dicen que no hay sueños durante el sueño. Llevar un registro escrito de la experiencia onírica ayuda al estudiante a recordar sus sueños, dicho registro es fundamental en los sistemas de análisis propuestos por Jung y Freud.
Una de las mayores potencialidades del uso de un diario mágico es el desarrollo de la capacidad de comprender causas y efectos. Para que este potencial se desarrolle, es necesario que el estudiante registre las condiciones bajo las cuales ocurrieron las experiencias, cualesquiera que sean. Idealmente, el estudiante comenzaría cada registro diario con notas generales sobre sus condiciones físicas, mentales y espirituales, incluyendo notas breves que se relacionen con cambios emocionales, sentimentales, espirituales y biológicos – cansancio físico/mental, enfermedad (intensidad de los síntomas), grado de dispersión/concentración mental, estado de ánimo, etc. Es importante que el estudiante registre ubicaciones, horas, fechas y disposiciones planetarias siempre que sea necesario o posible; conocer la fase lunar, por ejemplo, puede ser información importante al consultar registros anteriores.
En unos meses el alumno podrá establecer relaciones más profundas entre causas y efectos, no sólo en aspectos místicos, espirituales o mágicos, sino también en aspectos prácticos de su vida diaria.
El diario también puede ser la base para crear un grimorio personal que contendrá literalmente las claves de los conocimientos teóricos y prácticos del alumno. Herramienta que puede llegar a ser importante en evocaciones, invocaciones, cultos y ceremonias.
Uno de los ocultistas que más enfatizó el uso de diarios fue Aleister Crowley. En la primera parte de su Liber E vel exercitiorum leemos:
“Es absolutamente necesario que todos los experimentos se registren durante o inmediatamente después de su realización.
Es muy importante conocer las condiciones físicas y mentales del experimentador.
Se debe señalar el lugar y hora de todos los experimentos, así como el clima y todas las condiciones que puedan tener algún tipo de influencia en el experimento, tales como causas adjuntas, causas de resultados, inhibidores y fuentes de error.
El aa. No aceptará ningún experimento que no haya sido bien registrado.
A estas alturas no es necesario que tengamos que hablar del fin último de nuestras investigaciones. Tampoco pueden entenderlo aquellos que no han alcanzado el dominio de estos cursos elementales.
Se pide al experimentador que haga uso de su propia inteligencia y que no se vuelva dependiente de otra persona o personas, por diferentes que sean. Esto también nos incluye a nosotros.
El diario escrito sobre tus experiencias debe estar escrito de manera inteligible para que otros puedan beneficiarse de su estudio”.
“El libro São João, publicado en el primer número de Equinox, es un buen ejemplo de este tipo de diario, escrito por un estudiante avanzado. No fue escrito tan simplemente como queríamos, pero se revela el método.
Cuanto más científico sea el diario, mejor. También hay que registrar las emociones, ya que forman parte de las condiciones.
Escribe con sinceridad y atención. De esta manera podemos acercarnos al ideal”.
Liber E vel exercitiorum sub figura IX es uno de los primeros trabajos de estudio que se suele recomendar a los aspirantes en Thelema, es un texto breve con siete capítulos sobre: uso del diario mágico, clarividencia física, asana (postura), pranayama ( regularizar la respiración), dharana (control del pensamiento), limitaciones físicas y un curso de literatura (contiene veinticuatro obras para lectura/estudio). Al contrario de lo que pueda parecer, el estudio y la práctica de los ejercicios del Liber E no se limita únicamente a Thelema. El entrenamiento sugerido en este Liber aumenta considerablemente varias aptitudes y habilidades importantes para los logros místicos y mágicos del estudiante.
Un buen ejemplo de cómo llevar un diario lo encontramos en otro texto de Crowley conocido como “John Saint John – The Record of the Magical Retreat by GH Frater O.´.M.´.”. Publicado por primera vez como suplemento especial en The Equinox Volumen I Número I, el texto ayuda a disipar parte del aura mítica de Crowley, ya que revela un poco de su identidad.
Otros libros de Crowley que pueden ayudar a comprender la importancia de llevar registros diarios son Las confesiones de Aleister Crowley, El diario de un drogadicto y Liber O Manus ET Sagittae.
Papus, otro famoso ocultista, nos llama la atención cuando se trata del “Libro” que debe ser escrito y, si es posible, fabricado por el propio mago. Una obra que debe prepararse y escribirse con la mayor fuerza de voluntad posible.
Es común encontrar diarios mágicos que se confunden con grimorios (libros) personales y que se transforman en poderosas armas mágicas, principalmente de evocación.
Las técnicas de registro también son utilizadas por los aspirantes a los Iluminados de Thanateros en el Monasterio Mágico de Kaos a través de informes.
De lo que hemos explicado aquí, es fácil concluir que llevar un diario mágico es una tarea que sólo trae resultados positivos, duraderos e importantes para todos los estudiantes de todos los “niveles”, independientemente de su orientación mágica, mística, religiosa o filosófica. Sólo necesitas equiparte con una libreta, un bolígrafo y ganas de dedicar este importante instrumento a tu constante evolución.
POR PHARZHUPH, Lucifer Luciferax
