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Los Nombres Bárbaros son Nombres corruptos de deidades utilizadas en Invocaciones y Evocaciones mágicas. Los nombres bárbaros suenan como los originales y tienen la misma fuerza mágica.
Los Nombres Bárbaros se han utilizado desde la antigüedad, especialmente en hechizos en los que no se entendía el idioma original.
Algunos nombres bárbaros se originaron en la magia egipcia helenística. Un ejemplo de nombres bárbaros proviene de un texto mágico greco-egipcio llamado Papiro Mágico de Harris:
¡Adiro-Adisana! Adirogaha-Adisana. Samoui-Matemou-Adisana!
Samou-Akemoui-Adisana! Samou-deka! ¡Arina-Adis-ana! Samou-dekabana-adisana! Samou-tsakarouza-Adisana! ¡Dou-Ouaro-Hasa! ¡Kina! ¡Hama! (Pausa.) Senefta-Bathet Satitaoui-Anrohakatha-Sati-tao
Los Nombres Bárbaros se integraron en la sabiduría y la magia judía, helenística, gnóstica esenia, cristiana. Adquirieron importancia en la tradición mágica occidental, apareciendo en la magia enoquiana de John Dee y Edward Kellly.
Los Nombres Bárbaros fueron especialmente enfatizados por Aleister Crowley por su poder para elevar la conciencia del mago al realizar un ritual. Crowley dijo que “largas cadenas de palabras formidables que rugen y gimen a través de tantos conjuros tienen un efecto real al elevar la conciencia del mago al tono adecuado. . .”
Lectura adicional:
Crowley, Aleister. Magia en teoría y práctica. 1929. Reimpresión, Nueva York: Dover Publications, 1976.
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fuente:
La Enciclopedia de Magia y Alquimia, de Rosemary Ellen Guiley.
Copyright © 2006 por Visionary Living, Inc.
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Texto adaptado, revisado y enviado por Ícaro Aron Soares.
